Monumento a Miguel de Molina

Plaza de Capuchinos

fuente de Málaga

La fundación del convento de los capuchinos, a principios del siglo XVII, fue el primer hito en la configuración urbana de esta zona de la ciudad. A partir de entonces delante del convento se fue formando una plaza que, desde muy pronto, se convirtió en centro del nuevo barrio y encrucijada de caminos. El aspecto actual de la plaza de Capuchinos responde a un proyecto realizado en 1877 por el ingeniero don José María de Sancha, que después ha sufrido diversas reformas. El jardín existente alberga un monumento a la Inmaculada que utiliza como basamento una antigua fuente de mediados del siglo XIX.En una isleta situada en la plaza, junto a la confluencia de la alameda de Capuchinos y la calle de Eduardo Domínguez Ávila, fue inaugurado en 1999 un monumento al cantante Miguel de Molina, que nació en una calle cercana en 1908 y, después de ser considerado «el rey de la copla», murió en Buenos Aires en 1993.El escultor Suso de Marcos concibió un diseño en el que el agua juega un importante papel, aunque no se trate de una fuente propiamente dicha. El conjunto se compone de un muro de hormigón chapado de acero inoxidable, del que sobresalen dos piezas de piedra cuadradas cuyo centro está horadado, y en el que se alojan el positivo y el negativo del rostro del artista, en bronce. El agua resbala por el acero en forma de lámina para recogerse en un pequeño estanque a los pies del monumento.