En nuestra apuesta por la sostenibilidad, a finales del año 2013 abandonamos el sistema convencional de precio unitario y adoptamos el sistema de tarificación por habitante. En este sistema, con el objetivo de establecer un reparto más justo de los costes del servicio de agua entre todos, las tarifas de consumo que se aplican tienen en cuenta el número de habitantes acreditados en cada vivienda. De esta forma favorece a los consumidores responsables, que se benefician de la tarifa más barata de las principales ciudades de Andalucía (fuente Informe Facua sobre las tarifas del año 2021) y penaliza los consumos excesivos de una manera más realista y justa.

Es un sistema de tarificación más justo y solidario, ya que garantiza que cualquier ciudadano de Málaga, a igualdad de consumo individual, pagará lo mismo por M3 consumido que su vecino evitando las situaciones producidas por el sistema tarifario convencional donde unos ciudadanos subvencionan a otros por el mero hecho del nº de personas que conviven en la vivienda.